Páginas

¡No te vayas sin seguirme, si te ha gustado!

miércoles, 24 de julio de 2013

Dolor.

Y llega un momento en que todos los golpes te parecen caricias. De tan fuerte que te han dado ya, ahora solo te queda sentir que no hay nada peor, que todo lo que has pasado ya ha sido lo peor que te podía pasar. Pero te equivocas, y a pesar de no querer admitirlo, ya lo sabías. Sabías que todas sus caricias, se convertirían en sangre derramada. Que no se quedaría así, que todo iría a más, a peor, que las lágrimas serían tu bebida diaria, que la sangre sería como el sudor, a todas horas, cuando te asustas. Y todo acaba, pero no para ti. Para ti, solo acaba de empezar.